Salgo a andar en bicicleta
todos los días. No voy a ningún
lugar en especial. Esquivo
pozos, paso despacio
por encima de las piedras; aunque en la ruta
los colectivos y los autos
me rocen el manubrio
mi tarea es mantener el equilibrio,
andar siempre
en la misma dirección
recta, mirando
para adelante.
Cuando estoy agitado, y me arde
la boca de sed, y mis pulmones
silban con una punzada
aguda, se me ocurren
pensamientos aislados que
por lo general no tengo.
Pienso: la mujer que me espera
usa una hebilla azul
en el pelo.
Pienso: la mujer que buscás
y en algún lugar de la tarde
te espera,
cuando duerme
tiene sueños oscuros
en los que aparecen
tu cara
y tus complejos sanados.
Cuando estoy en una calle
que desciende de una loma, dejo
de empujar los pedales, y puedo tener
un momento de descanso
y paz
que no se va a volver a repetir
en el día.
Entonces el viento en la cara
no me dice nada, es solamente un vidrio blando
que me deja respirar, y yo
creo en la buena fe de esa inercia.
Pero cuando la calle está en subida
y el peso de mi cuerpo
y el de la bicicleta
abajo de mi cuerpo
se triplican,
siento un cansancio
que me quema,
en mi frente
se acumulan
pensamientos sin orden,
que giran y chocan
entre sí, y lo único que puedo
esperar
es que al final de la loma,
cuando llegue al punto
en que la gravedad
se equilibre, tenga el corazón
preparado
para enfrentar
lo que mis pensamientos
resolvieron sin mí.
Cuando dejo
la bicicleta apoyada
en el patio de mi casa,
tengo la sensación
de estar dejando
lo que amo.
Pienso: mañana.
es ella.
Mañana
va a existir.
Mañana
me espera su vida.
Esto está muy bien y aplica para un "Danos hoy el blog de cada día"
ResponderEliminarLo haré mío ya, 'chas gracias ;)
La bici es lo más y tirarse por la barranca también. Muy lindo!
ResponderEliminarAmo a los poetas contemporáneos, cada día un poco más.
ResponderEliminarNo quiero que desaparezcan de la Tierra, háganme el favor.
y si no se equilibra continuará escribiendo para encontrar equilibrio... y ojalá no lo encuentre, así continuará mas allá de todo y todos haciendo textos de pedir equilibrio que son ayuda de psiquiatricos que tmb escriben y se creen artistas... yo te ayudo!
ResponderEliminarbesotes
a veces sólo los objetos físicos y tangibles nos recuerdan quienes somos
ResponderEliminarEsaaa, qué grata-honrosa sorpresa, capo. Ahora me voy a tomar el atrevimiento de subir uno tuyo, eh (con tu anuencia, por supuesto).
ResponderEliminarGracias a los comentarios generosos, abrazoss y nos leemos