miércoles, 17 de febrero de 2010

Promesa


Quedó sin agua el malvón, quedó el cajón semiabierto,
el primero, el de los cubiertos, quedaron enfrentadas las sillas,
quedó la persiana baja, el calor de la siesta estancado,
quedó prendida la radio hasta que murieron las pilas,
quedó algunos segundos la puerta
girando sobre sus goznes, quedó la baldosa
recalentando en el patio quedó estacionado el Fiat,
quedaron las ruedas sin aire, quedó la hojarasca
bajo el chasis,

quedó durmiendo el gato sobre el techo
de chapa,
quedó la ropa colgada en la terraza,
quedó esperándote, quedó vacía, hueca,
quieta, esperándote quedó, en silencio, la tarde.

5 comentarios:

  1. Cada poema mejora al anterior, ¿esto es deliberado?

    Mirá, una que también se pasa con los poemas:(bueh quería pegar el lnik, pero no se puede, Google-- Laura Yasan Zapatos Rojos.)
    Fue

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  2. triste, Pablo... tus palabras me llenaron de tristeza.
    Cuántas imágenes!!!

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  3. muy bueno, quedó soberbio el puema

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  4. Genial Pablo, la espera existe solo para ser representada.

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  5. Y yo me quedé triste, muy triste.
    Entre vos y SAL me dejaron abatida.
    Me encantó este momento que dibujaste.
    Beso!

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